El pasado fin de semana, Espabrok celebró su Premio Nacional en el Museo Reina Sofía de Madrid, tras una visita guiada al museo a la que acudieron corredores de la asociación y destacados directivos de aseguradoras. Presentó el acto el nuevo gerente de la asociación, Diego Fernández, quien dio paso el presidente de Espabrok, Silvino Abella. La primera parte de su intervención tuvo un marcado carácter social, aludiendo a las dificultades por las que atraviesan las familias españolas en estos momentos y el “deplorable modelo político y económico del país”. Por eso, reclamó una participación más activa de todos para ayudar económicamente a los necesitados y a recuperar su dignidad: “Espabrok no debe ser ajena a estos problemas porque debemos ser una empresa de principios.
Por eso, hemos decidido colaborar con entidades de labor social y hoy entregamos al Banco de Alimentos de Madrid el equivalente a 30.000 comidas para hacer posible su labor”, donación que fue recogida por el presidente de la asociación, quien explico el trabajo de ayuda social que desarrollan desde hace 24 años y anunció que una de las “calles” de los almacenes de alimentos de la asociación llevará el nombre de Espabrok.Al acto asistió Francisco García, vicepresidente del Banco de Alimentos.
En su discurso posterior, Abella reafirmó el optimismo de Espabrok ante el futuro, “pese a una realidad pesimista en el marco de un sistema absurdo” y recalcón con vehemencia que “solo con el trabajo de emprendedores y autónomos logrará salir este país de la difícil situación en la que está”. Añadió que el seguro no es ajeno a esta crisis: “Afirmar que es un sector anticíclico puede llevarnos al inmovilismo y alejarnos de la realidad, por lo que tenemos que adecuar nuestro modelo y aumentar el servicio al cliente, con más esfuerzos para mejorar la imagen del sector en la sociedad, desmarcándolo de los intereses de la banca”.
También resaltó la importancia del asociacionismo en estos momentos, “que va más allá de un tema puramente crematístico e implica valores para las personas, las empresas y los clientes”. Asimismo, hizo una llamada a las entidades a “un diálogo fluido y un consenso flexible, que acepten el asociacionismo sin injerencias y sin incitación al individualismo con argucias crematísticas. No creemos que seamos el modelo único, pero aspiramos a tener el reconocimiento que merecemos por la valía personal del colectivo. Desde hace 24 años, hemos progresado mucho a base de un gran sacrificio. Es cierto que ha habido cambios en la organización por el desgaste del tiempo, la falta compromiso, la desobediencia a los dictados del Consejo, e incluso la falta de honestidad, pero el tiempo será el juez de todas estas actitudes. Aceptamos a quienes piensan de otro modo, pero no vamos a admitir la crítica soez. Intentaremos aprovechar experiencias pasadas para aprender. Si alguien piensa que en estos tiempos de cambio cree que hemos tocado fondo, lo que le diré es que no hemos tocado techo”.
Abella continuó comentando los cambios en la sede de la asociación, la gerencia y los departamentos, que servirán para darmás servicio a la red, “con criterios empresariales”. Además, fomentarán la entrada de nuevos corredores involucrados, acuerdos estables con las entidades, desarrollo tecnológico, y la implantación de un sistema comercial que unifique la gestión de todas las corredurías del grupo, “lo que será un reclamo para atraer a otras”.
Desde hoy ya se prepara la Convención Nacional para el año que viene, mientras tanto seguiremos ofreciendo las mejores pólizas enseguros de responsabilidad profesional y en seguros de crédito y caución.