Un viaje puede torcerse en cuestión de minutos si ocurre un imprevisto sin estar asegurado. Un seguro de viaje no es un gasto innecesario, sino una inversión en tranquilidad.
La Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) es válida en todos los países de la Unión Europea (UE), del Espacio Económico Europeo (EEE) y en Suiza. Sin embargo, no es válida en los países europeos que no forman parte de estos acuerdos y en el resto de los destinos internacionales.
Por eso, al planear un viaje a cualquiera de estos destinos, es crucial considerar la contratación de un seguro de viaje con suma asegurada suficiente para cubrir la asistencia médica y sanitaria, en función del destino que se elija, y así evitar la desagradable sorpresa de tener que hacerse cargo de los gastos ocasionados después de sufrir un percance.
Este fue el caso de un joven sevillano que sufrió un accidente de tráfico en Bali, que requirió múltiples intervenciones quirúrgicas. La factura final ascendió a 260.000 €. Un joven español de 22 años sufrió un desvanecimiento mientras practicaba deporte en Estados Unidos. Tras ser hospitalizado durante 9 días, con múltiples pruebas, medicación y visitas de especialistas, la factura final ascendió a 240.000 €.
Además de la asistencia médica, un seguro de viaje cubre:
- Cancelación o interrupción del viaje por causas justificadas.
- Pérdida o robo de equipaje.
- Demoras en vuelos y gastos derivados.
- Responsabilidad civil en el extranjero.
- Repatriación sanitaria o funeraria.
Es imprescindible contratar el seguro en la semana siguiente a la reserva del viaje. Solo así se activa la cobertura de cancelación desde el primer día, protegiéndote incluso antes de salir de casa.
En Seguros Francés, te asesoramos para que elijas la póliza ideal según tu destino, duración y tipo de viaje. Este verano, no pongas en riesgo tu salud, ni tu bolsillo.